Martina tiene 11 cicatrices: declaró que su tutora le pegaba con un palo de amasar y le clavó un cuchillo
La declaración de la joven Martina Farías horrorizó a los profesionales que se la tomaron. La joven corroboró la violencia verbal y física que recibió de parte de su tutora Beatriz Irene López. En su testimonio, corroborado por certificado médico, Martina exhibió al menos 11 cicatrices producto de los castigos recibidos. La joven explicó con lujo de detalles en qué circunstancias los recibió.
«Le pegaban con cualquier cosa: palo de amasar, cadenas de bicicleta, manguera, una pala», e incluso le clavaron una cuchilla en el brazo «, revelaron a La Unión de Lanús fuentes de la UFI 4. Herida y todo, fue enviada a entregar un pedido para la casa de comidas en la cual su tutora la hacía trabajar.
Martina llegaba siempre tarde al colegio, porque su tutora no le permitía asistir hasta no haber terminado con el último pedido. En ese clima de horror se desarrolló su vida, en la casa de la calle Bolivia 1426.

