Los odia: Soledad Acuña, ministra de Educación de CABA, llamó «viejos», «pobres» y «fracasados» a los docentes
La ministra de Educación de la Ciudad de Buenos Aires, Soledad Acuña, sorprendió con un discurso absolutamente estigmatizante respecto de los docentes, al llamarlos «viejos», «pobres» y «fracasados». En diálogo con su amigo y aliado ideológico, el diputado nacional y troll macrista Fernando Iglesias, Acuña aseguró que los docentes son «cada vez más grandes de edad, que eligen la carrera docente como tercera o cuarta opción luego de haber fracasado en otras carreras». Acuña afirmó también que los docentes pertenecen a niveles socioeconómicos bajos y que «en términos de capital cultural» tenían poco para ofrecer.
Las declaraciones de Acuña -que tienen una semana de antigüedad aunque se viralizaron recién hoy- produjeron un repudio enorme en la comunidad educativa y en todo el país, por la increíble carga de desprecio que llevan, de parte de una persona que ocupa justamente el cargo de ministra de Educación en la Ciudad de Buenos Aires.
“Sería un gran gesto democrático que Horacio Rodríguez Larreta le pida la renuncia a su ministra de Educación», dijo la legisladora del Frente de Todos Lorena Pokoik, quien presentó un proyecto de declaración de repudio a expresiones de Acuña.
En otro tramo destacado de la conversación -que no aparece en el extracto aquí publicado, pero sí en la charla completa con Iglesias, Acuña invitó a la comunidad a denunciar docentes. «Un docente que aprende bien sabe que lo que tiene que hacer es enseñar a pensar, no decirle a los chicos en qué pensar», indicó, y pidió a las familias de los alumnos «que hagan las denuncias» de los casos de «bajada de línea en el aula para poder intervenir y trabajar con la conducción y los docentes».

La Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) repudió los dichos de Acuña al considerar que «hizo explícito su desprecio por quienes llevan adelante la tarea cotidiana de enseñar, y dejó expuesto el programa educativo de la derecha en la Ciudad, en línea con muchas de las medidas que adopta Jair Bolsonaro en Brasil».
El secretario gremial de la Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA), Eduardo López, se expresó en Twitter: «Hablan como gerentes de una comunidad educativa que maltratan, espían y persiguen desde hace 13 años y que odian por no poder doblegar».

