Diego Kravetz ratificó la denuncia de La Unión de Lanús palabra por palabra, pero eso sí, nos llamó «kirchneristas»
El intendente interino, jefe de Gabinete y secretario de Seguridad de Lanús y vecino de Puerto Madero, Diego Kravetz, ratificó a través de un vídeo subido a sus redes sociales prácticamente punto por punto la denuncia de La Unión de Lanús relativa a la privatización encubierta del Club Centenario de Monte Chingolo, pero eso sí, dijo que este medio es «kirchnerista». La bajada de este medio reza: «Información local, pensamiento nacional», de manera que ni ahora ni nunca ocultamos nuestras preferencias políticas. Somos peronistas y valoramos enormemente las gestiones de Néstor Kirchner y Cristina Fernández al frente del Poder Ejecutivo, por lo cual es técnicamente correcto llamarnos «kirchneristas», aunque Kravetz lo haga, como decía Néstor (el bueno, no el contador de Socma) «para bajarnos el precio».
El ex jefe del bloque de Legisladores porteños del Frente para la Victoria (sí , de Diego Kravetz hablamos) dejó de ser kirchnerista hace muchos años, no sabemos si antes o después de intentar engrampar a un grupo de hijos de desaparecidos en un dudosísimo negocio inmobiliario, pero sí sabemos que fue antes de labrar una gran amistad política y comercial con otro porteño de ley: el ministro de Economía de Macri en la ciudad de Buenos Aires, Néstor Grindetti. Dicha amistad se forjó en la realización de encuestas truchas en CABA a cargo de una empresa ídem llamada Signica, por encargo de Grindetti. Una era sobre satisfacción de los proveedores de la ciudad con la gestión de Grindetti y la otra era sobre satisfacción de los porteños con su gestión. Vale decir que la empresa ocupada de tan ambiciosas gestiones tenía una empleada sola y vale decir que las encuestas no tenían ningún sentido porque Grindetti estaba dejando la gestión porteña para candidatearse en Lanús.
Pero perdón, nos fuimos por las ramas. El hecho es que Kravetz reconoció que presidió el club (sigue presidiéndolo pero está en uso de licencia, al mejor «estilo Grindetti»), reconoció que este fue privatizado («tercerizado», dijo) y reconoció además que todo tiene precio allí a partir de las 17, es decir cuando la mayoría de los adultos salen de trabajar y cuando la mayoría de los chicos salen del colegio. Es decir, en el momento en que la mayoría de los vecinos y vecinas podrían disfrutarlo. Lejos de comportarse como un funcionario público, Kravetz privatiza lo que es de la comunidad amparándose en el eufemismo de «asociarse con inversores «.No explicó Grindetti por qué extraña razón las transferencias se hacen a nombre de su funcionaria Claudia Serapio. ¿Es la titular de la empresa (es decir, está de los dos lados del mostrador y hace negocios con sí misma) o los tercerizadores/privatizadores tienen en ella confianza ciega?
Decíamos que Kravetz dejó de ser kirchnerista hace muchos años. Eso sí, ni él ni Grindetti dejaron nunca de.ser porteños, lo que no tiene nada de malo en sí mismo, salvo que te propongas gobernar Lanús.
LOS QUE HACEMOS LA UNIÓN DE LANÚS.

